El "Dépor" de Borges se hunde en el descenso tras ser goleado

Por el bien de la institución, en el Elche deberían haber puesto césped en los despachos y colocado ordenadores en el vestuario para que jugadores y técnicos hubieran tenido el poder total en la institución.

Si fuera de los terrenos de juego el rendimiento hubiese sido la mitad de lo conseguido en el mismo, otro gallo cantaría en el conjunto ilicitano.

Viendo como los futbolistas luchan cada balón como si fuera el útlimo, ante la solidaridad existente entre ellos en tareas defensivas y las intensidad que imprimen los chicos de Escribá al juego, a más de uno que los vea desde fuera se le debería caer la cara de vergüenza.

Una plantilla que se deja en el césped hasta la última gota de sudor, no merece tener los directivos que ha tenido hasta las últimas fechas.

El Deportivo sufrió en sus propias carnes de lo que es capaz de hacer el Elche. Los gallegos vivieron en primera mano el hecho de que el orgullo está por encima de personajes nocivos para el fútbol y que el balón no entiende de economía.

Los futbolistas ilicitanos, a un pequeño paso de la salvación, merecen un monumento junto a la Dama de Elche.

El 4-0 final que mostró el marcador no fue casualidad y visto lo visto sobre el terreno de juego, daba la impresión de que los gallegos no marcarían por mucho que se quedaran toda la semana encerrados en el Martínez Valero y los locales podrían superar a Fabricio cuando lo vieran conveniente.Jonathas, Lombán, Pasalic y Rodrigues fueron los goleadores, pero Tyton estuvo perfecto,Damián Suárez estuvo imparable, Fajr puso la calidad, Cisma no dio opción a Lucas y Roco fue un auténtico muro.

Mientras los aficionados buscaban su asiento por las gradas, Damián Suárez sorteó a tantos rivales salieron a su paso a base de caños. Llegó hasta la línea de fondo y vio que Jonathas tenía ganas de ampliar su cuenta goleadora. Pase atrás y tanto del brasileño. El Deportivo no sabía lo que le esperaba.

El Dépor quería pero no podía Lo cierto es que los gallegos lo intentaron. Quisieron jugar en el campo rival y su idea no era corretear tras los futbolistas locales, pero con el paso de los minutos, todas las ideas de Víctor Sánchez del Amo se fueron diluyendo. Fabricio no pudo ser el salvador de otras ocasiones y poco pudo hacer en los goles de un Elche que tomó ventaja tras un polémico penalti, pero daba igual.

Si Lombán no hubiera tenido oportunidad de marcar la pena máxima, los goles habrían llegado de otra forma. No era el día para quejarse entre los blanquiazules.

Con timidez, los visitantes aparecieron cerca de los dominios de Tyton, pero los disparos deCavaleiro y Oriol Riera no provocaban mucho más de un pequeño movimiento en el meta local.Luisinho fue el único que obligó a que el guardameta se luciera, pero finalmente el travesaño evitó el que habría sido el gol del día.

Jugando con comodidad, dejando pasar los minutos y controlando el juego sin sobresaltos, el Elche mató el choque a la contra. Primero fue Pasalic el que aprovechó un despeje de Fabricio y en el último suspiro, Rodrigues se sumó a la fiesta. Jonathas no acertó en el mano a mano con el meta gallego, pero el medio cedido por el Chelsea estuvo rápido para adelantarse a la zaga blanquiazul.

El Deportivo no tenía ideas. Sus jugadores de ataque no intervenían en el juego. Lucas y Cavaleiro se perdieron por las bandas y Oriol Riera apenas pudo entrar en el partido. Además, la medular era cosa de Mosquera y Pasalic en todo momento.

La buena noticia para los de Víctor es que todavía están fuera de los puestos de descenso pese a sumar doce partidos sin ganar, la mala es que la salvación se encuentra al final de un camino con demasiadas piedras por sortear.

Esa situación la verá desde la meta el Elche, que pase lo que pase en los despachos, puede estar tranquilo porque en el césped ha demostrado que es de Primera.